Estamos en pleno verano, con muchísima calor y con el acondicionador mirándonos con ojitos. Ahorrar energía durante el verano es muy importante, pero, para ello es imprescindible contar con aislantes térmicos ecológicos para reducir el consumo de energía.
Los aislantes térmicos ecológicos ayudan a ahorrar calefacción en invierno y aire acondicionado en verano. Además, estos materiales aislantes del calor mejoran la calidad del aire interior de la vivienda. ¿Sabías que las viviendas con un buen aislamiento térmico pueden ahorrar hasta un 60% de energía en cuanto a climatización?
Ya os hablamos anteriormente sobre los materiales de construcción reciclados y en este artículo os hablaremos sobre los diferentes materiales aislantes del calor ecológicos, con sus diferentes beneficios.
El corcho, un gran aislante ecológico
El corcho está entre los aislantes ecológicos más usados y demandados. Proviene de la corteza de los alcornoques, que es un árbol que crece en el territorio mediterráneo.
Además, su producción es sostenible porque en su extracción no genera casi residuos. Y como el alcornoque renueva su corteza cada 9-12 años, se puede obtener corcho sin que se perjudique al árbol.
Es reciclable y renovable, además de impermeable, por ello también se recomienda utilizar en sótanos. Se suele usar en forma de paneles de corcho prensado.
La plancha de corcho, un panel rígido con un espesor de 3-10 cm es uno de los formatos más comunes. Se recomienda utilizar para aislar paredes interiores, fachadas y tejados.
Celulosa, material ligero y aislante
Es otra de las alternativas más usadas. Es un papel reciclado que se inyecta en los huecos y cavidades abriendo agujeros en los muros y techos. Requiere aditivos químicos para evitar que aparezca moho.
Es un material muy ligero y muy buen aislante. Son resistentes al fuego, a la descomposición, y absorben la humedad. Se suele utilizar para el aislamiento térmico de cubiertas, cerramientos verticales y como protectores de anti incendios.
Lino, aislante térmico
Es un aislante térmico, pero también acústico. Aunque realmente los aislantes térmicos son también acústicos, así que hacemos dos por uno. Se produce a través de las fibras textiles de la planta Linum usitatissimum, es de cultivo fácil y de bajo impacto. Con estas fibras también se elaboran hilo y tejidos, por ello también es reconocido en el ámbito téxtil.
Ofrece una buena resistencia mecánica sin requerir tratamientos adicionales. Aunque no es recomendable utilizarlo en ambientes húmedos.
Además, si se prensan las semillas del lino, se obtiene aceite de linaza, un aceite secante que sirve para proteger la madera.
Aislantes como las fibras de madera
Principalmente utiliza residuos del procedimiento de la madera para su fabricación, es decir, las pérdidas de la trituración de la madera.
Hay diferentes tipos de paneles aislantes de madera. Y cuando se combinan con otros materiales tienden a mejorar su eficiencia.
Los aislantes de fibra de madera funcionan (como la mayoría) gracias al aire que queda atrapado en su liosa estructura. Este material, como el lino, no debe mojarse o perderá sus propiedades.
La Paja como material de construcción
Este material, es más un material de construcción que aislante. Pero es un aislante magnífico, la temperatura interior de las viviendas de paja produce un efecto parecido a una cueva. Y sin apenas gastar energía. Aunque tiene baja resistencia al agua, con lo que se debe colocar protegida de la humedad.
La Lana como aislante sostenible
Se obtiene de la oveja y mejora su capacidad de aislamiento cuando se humedece. Es natural, renovable y reciclable. Además, es capaz de expulsar la humedad cuando el ambiente pasa de húmedo a seco.
Este material debe ser tratado con higiene y preparado para que no lo ataquen las polillas. Existen dos tipos de aislante térmico con lana:
- Mantas de lana de oveja: se utilizan como aislantes de paredes.
- Fieltro de lana de oveja: se utiliza en aislamiento de viviendas provisionales.
Beneficios de los aislantes térmicos
La opción de elegir aislantes térmicos ecológicos aporta muchos beneficios que hacen que sean muy buena elección.
- Son saludables. Como son ecológicos, los aislantes son más respetuosos con el medio ambiente y con nuestra salud, ya que no contienen ningún componente tóxico.
- Permiten la transpiración de las viviendas sin dejar que las corrientes de aire entren en el interior.
- Disponen de una gran capacidad aislante térmica, siendo tres veces mayor que la de los aislantes térmicos convencionales. Esto ayuda a mantener el calor en el invierno y el fresco en el verano.
- Muchas absorben la humedad de la vivienda sin perder capacidades aislantes.
- Son biodegradables, por lo que no son contaminantes para el medio ambiente.
- Su durabilidad es superior a la de los aislantes convencionales sin perder sus propiedades.
- Su fabricación tiene un coste energético bajo, reduciendo así su emisión de gases contaminantes.
Está claro el compromiso con el medio ambiente si utilizamos estos materiales aislantes ecológicos, dado que potencian el ahorro energético, minimizan la contaminación y aseguran la calidad ambiental del interior de la vivienda. Es una gran oportunidad para aportar un granito de arena.